31 octubre 2018

Un menú de miedo para Halloween



¡La noche más terrorífica del año se acerca! Poco a poco Halloween se ha convertido en una costumbre tan española como ir a los cementerios el día de Todos los Santos. De esta manera, cristianismo y ritos paganos (muchos tampoco nos son tan ajenos. Recordemos a las meigas y bruxas de Galicia) se dan la mano, lo que ha traído consigo una fusión cultural.

Dentro de ella, destaca la importante aportación gastronómica que Halloween ha traído a nuestras vidas. Si antes de su desembarco en España, por estas fechas, comíamos buñuelos de viento, huesos de santo o chulas de calabaza, ahora, también, disfrutamos de manzanas caramelizadas, bizcocho o flan de calabaza, así como de recetas de aspecto “halloweenero”. Precisamente, a estas últimas dedicamos este artículo.

Para beber: zumo de naranja, zanahoria o grosella roja

Además del negro de las tinieblas y el blanco de los fantasmas, los 2 colores por excelencia de Halloween son el naranja de las calabazas y el rojo de la sangre, el alimento de los vampiros.

Por tanto, te recomendamos que si quieres tomar algo original en Halloween, en lugar de beber vino tinto (que puede hacer de sangre, desde luego), optes por el zumo de grosella roja.

Respecto al zumo de tonos naranjas, como la zanahoria no siempre gusta a los niños (o a los adultos), te proponemos sustituirlo o fusionarlo con zumo de naranjas. ¡Nutritivo y terrorífico!

De primer entrante: pequeñas calabazas de arroz

Para estas calabacitas necesitarás 150 gramos de arroz, colorante alimentario de tono naranja o salmorejo (según prefieras), aceitunas negras (sin hueso) y pimiento verde (para hacer los rabitos de las calabazas).

Si decides hacer las pequeñas calabazas con colorante alimentario, deberás ponerlo en el agua donde cuecas el arroz y, a continuación, dejar que hierva y verter el arroz. En cambio, si has decidido poner salmorejo, te aconsejamos que lo añadas cuando estés emplatando.

Cuando el arroz esté listo, ponte aceite de oliva en las manos y comienza a hacer bolitas con el arroz. Una vez tengas 10-12, corta las aceitunas con las clásicas formas que adoptan los ojos, narices y bocas de las calabazas de Halloween y resérvalas.

En una fuente, pon las bolas de arroz (si van a ser con colorante, tu arroz ya será naranja), vierte por encima, con cuidado, el salmorejo justo para teñir, “pega” las aceitunas negras y en la parte superior de las ya mini calabazas, sitúa el tallo elaborado con pimiento. Si el pimiento no te entusiasma, siempre puedes emplear el tallo de manzanas.

De segundo entrante: sushi tenebroso

Esta receta tiene el punto gourmet que toda celebración necesita. Preparar sushi, como ya te contamos hace un tiempo, no entraña gran dificultad.

Por tanto, una vez tengas hechas las bolas, al igual que en el plato anterior, te toca hacer de ellas monstruitos o motivos típicos de Halloween.

Para simular una calabaza, en este caso, utilizarás salmón ahumado. Los ojos, nariz y boca de la misma puedes elaborarlos con hojas de alga nori o con trufa negra (la salada, no la dulce).

Otro adorno “halloweenero” puede ser una telaraña en un rincón oscuro. Entonces, por encima de la bola, sitúa y extiende caviar y, para crear los diferentes hilos, emplea lonchas de queso (previamente, cortadas en tiras finitas y pequeñas). Las telarañas son formas perfectas, pero esto es Halloween, cuanto más caótica, mejor, dará más miedo.

¿Qué pasa con el monstruo de Frankenstein? Pues que es una de las bolas de sushi más sanas. La criatura a la que dio vida la escritora británica Mary Shelley es verde en las películas. Por tanto, puedes conseguirla con guacamole (cara) y pimienta (ojos, nariz y boca) o con un pedazo de hoja de lechuga (o acelga, o espinaca…) y caviar. Para los clavitos que cosen la cara del monstruo, lo mejor es optar por palitos de zanahoria.

De plato principal: hamburguesa “acalabazada“ con queso y tomate

Esta es de las recetas de Halloween más rápidas de preparar. Te recomendamos que sirvas las hamburguesas poco hechas, para que se marque más la parte roja y desprendan jugo.

Por encima de la carne, sitúa una loncha de queso (con la nariz, ojos y boca recortadas), y luego, restriega un tomate por encima. ¡Así tendrás una deliciosa calabaza podrida!

De postre: brownie de sepultura

Para finalizar tu menú de miedo de Halloween, nada mejor que una muerte por chocolate en forma de cementerio.

El procedimiento es el siguiente: preparar un brownie y, después, situar los complementos tenebrosos.

Los ingredientes necesarios para el brownie son 100 gramos de mantequilla, 4 huevos, 250 gramos de chocolate (es preferible negro), 100 gramos de azúcar, 2,5 gramos de bicarbonato sódico, 78 gramos de harina de trigo para postres y 70 gramos de nueces.

En un bol, introduce el chocolate (derretido en al baño maria o microondas) y la mantequilla. Remueve hasta que se fundan y pon el horno a calentar a 170ºC.

Mientras se precalienta, en un tiempo de unos 10 minutos, en un recipiente diferente al del chocolate y la mantequilla, integra los 4 huevos, los 100 gramos de azúcar y bate todo. Cuando se empiece a generar espuma, vierte estos ingredientes en el bol del chocolate y bate todo, de nuevo.

Con la ayuda de un tamizador, distribuye la harina por encima en 5 tandas, es decir, tras cada tanda, remueve para que la harina se integre y no genere grumos. Al terminar con este proceso, tritura las nueces y agrégalas.

A continuación, en una bandeja, pon papel vegetal por el fondo y las paredes y fíjalo con mantequilla. Después, vierte toda la masa y mete la bandeja en el horno. Déjalo a la temperatura que estaba durante 30 minutos.

Transcurrido ese tiempo, saca el ya brownie del horno, deja que enfríe un poco y desmolda. Antes de sacarlo a la mesa, crea el cementerio en su superficie.

Para ello, basta con que distribuyas galletas de chocolate trituradas (harán el efecto de tierra), insertes galletas rectangulares a modo de tumbas y coloques pedazos de frambuesas por la tierra y las lápidas, como si fuera sangre. ¡Terricioso!

¿Qué te parece el menú para Halloween que te proponemos? Te llevará poco tiempo y, con él, harás las delicias de pequeños y mayores. Eso sí, si prefieres librarte de cocinar ese día, recuerda que siempre puedes venir al restaurante de L’Arruzz a quedarte muerto con nuestra carta.

Y, por si tienes miedo a dejarte ver, durante bastante tiempo en un mismo sitio, estos tenebrosos días (¿quién sabe si nuestro restaurante puede ser objetivo zombie?) y prefieres comer en tu hogar, aquí te dejamos nuestros platos para llevar a casa.


1 comentario:

  1. decoandlemon.com
    Las calabazas desempeñan un papel icónico y versátil en las festividades de Halloween. No solo son un símbolo reconocible al instante de esta festividad, sino que también cumplen funciones importantes tanto en la decoración como en la gastronomía.

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