Dicen que las Navidades son mágicas. Y, desde
luego que lo son, pero ¿y la Semana Santa? Pues no se queda atrás, gracias a
esa fascinante fusión de tradición (procesiones y fervor religioso), modernidad
y, por supuesto, la increíble variedad de dulces típicos capitaneados por las
irresistibles torrijas.
Tanto si eres religioso y pones en práctica el
ayuno como si no, en L’Arruzz te proponemos que esta Semana Santa apuestes por unas torrijas menos
calóricas, pero igualmente deliciosas. Recuerda que, aunque parezca que falta
mucho, ¡ya no queda nada para el veranito!
Ingredientes
necesarios para estas torrijas más sanas
●
100 gramos de arroz integral.
●
1 barra de pan del día anterior.
●
Canela en rama (media rama).
●
2 litros de leche entera,
desnatada, semi o de soja (la mejor para que el arrepentimiento sea aún menor).
●
1 vaina de vainilla.
●
200 gramos de nata.
●
300 gramos de azúcar moreno (más
sano que el azúcar blanco).
●
1 limón y/o naranja (solo
necesitarás la piel).
●
Aceite de oliva virgen extra.
●
Harina de trigo.
●
3 huevos.
Preparación
de las torrijas con crema de arroz integral con leche
-Primera
etapa: la elaboración de las torrijas
Corta en rodajas de un grosor importante,
mínimo 3 centímetros, tu barra de pan. Nota: como hemos dicho en el apartado
anterior, el pan debe ser del día anterior, pero debes dejarlo a temperatura
ambiente o en una despensa. Nunca en la nevera o el congelador.
Una vez tengas las rodajas, ponlas en una
fuente honda. A continuación, en una cazuela, calienta un litro de leche con
150 gramos de azúcar, la media rama de canela, piel del limón y/o la naranja
(según tu gusto).
En el momento en el que hierva, quita la
cazuela del fuego y vierte su contenido en la fuente donde está el pan. Cuando
las rebanadas se hayan empapado bien y para evitar que se desmenucen, cógelas
con una espumadera y rebózalas con los huevos batidos y la harina.
Seguidamente, ponlas a freír con aceite
caliente. El único misterio que tiene este proceso es el de no romper cada
torrija al darle la vuelta.
Cuando veas que cada rebanada tiene el aspecto
característico de las torrijas de toda la vida, apaga el fuego y deja que se
escurran unos minutos sobre papel absorbente. Nota: no deben quedarte secas,
solo no chorreantes.
-Segunda
etapa: la crema
En un cazo, introduce el litro de leche
restante, los otros 150 gramos de azúcar moreno, la vaina de vainilla y la nata
y enciende el fuego. Cuando hierva, agrega los 100 gramos de arroz integral.
Deja que todo cueza, durante unos 30 minutos.
Mientras transcurra el tiempo, es imprescindible que remuevas todo el contenido
del cazo para evitar que el arroz se pegue.
Cuando compruebes que el arroz está hecho,
apaga el fuego y vierte todos los ingredientes del cazo en la batidora. Para
que la crema tenga textura de crema, bate la mezcla a poca intensidad.
Una vez la tengas, ponla a enfriar y
resérvala.
-Etapa
final: el emplatado
Para que el impacto en tus comensales sea
espectacular, lo mejor es sacar a la mesa cada plato con una torrija. El
procedimiento a seguir es el siguiente:
●
Pon crema de arroz en el fondo del
plato (servirá de base).
●
Coloca en el centro una torrija.
●
Y si quieres rematar faena, no hay
nada mejor como distribuir por la superficie de la torrija ¡un puñado de frutos
rojos!
Como has visto, la preparación de estas
torrijas un poquito más ligeras que las tradicionales es muy sencillo. Te
quitarán poco tiempo y te provocarán una mayor sensación de felicidad y
disfrute pleno, puesto que no engordan tanto.
Eso sí, como la Semana Santa son unas fiestas
muy ajetreadas entre las procesiones, las visitas turísticas y demás, te
recordamos que siempre que lo desees puedes darle un repaso a nuestra carta y venir a comer a L’Arruzz.
Asimismo, si no quieres estar en un restaurante, pero sí impresionar a tu
familia con una comida irresistible, te aconsejamos que hagas uso de nuestros platos para llevar a casa. Te lo
prometemos, ¡nadie se enterará de tu secreto!
Elijas lo que elijas, desde L’Arruzz, te
deseamos unas ¡felices vacaciones de Semana Santa!
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